Mario siempre caminaba solo por los campos de Alburquerque . El apodo le venia por un antepasado que cayo un día en una chumbera y se paso la vida
quejándose de las púas que se habían quedado clavadas en los lugares mas ocultos de su cuerpo . Mario estaba considerado como deficiente mental aunque su
único retraso fuera el analfabetismo .
Pero un buen día conoció a Carmen , quien empezó a acompañar en sus paseos .
Acudían cada tarde a una alberca para sentarse junto a un pozo al que Mario se acercaba con precaución ya que en su niñez casi muere ahogado y desde entonces temía al agua. Éstos solo se besaron una vez pero aquella relación poco a poco fue despertando no solo los recelos de Blas (padre de la joven ) sino los perjuicios de todos sus paisanos, prohibiendo a su hija que se viera con el muchacho. Pero Carmen siguió viendo a Mario por lo que su padre la envió a Madrid ( a casa de unos familiares) con la idea de que el tiempo y la distancia borrarían ese loco amor .
Pero fracaso por que su hija insistía todo el tiempo , lo que aun encendía el odio y la ira contra Mario .
El día de la romería , cuando todo el pueblo estaba fuera , planeo esperar a Mario en la alberca donde meses atrás se veía con su hija . El muchacho no lo vio hasta a poco metros de el , agachando la cabeza y sin decir nada se sentó en el borde profundo del pozo . Blas , se dirigió a el y tras mascullar algo le empujo fuerte haciendo que el muchacho cayera al agua. Mario aterrado logro agarrarse a un saliente , en ese momento el viento elevo por encima de Blas unos cardos secos . El joven exclamo antes de hundirse : ¡ Ese cardo sera el testigo de mi muerte !. Nadie dudo del suicido de Mario. A Blas le pesaba el remordimiento y decidió contárselo todo a Carmen la cual no volvería a verle jamas.
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